martes, 27 de octubre de 2009

Comparsa mental

El piensa que yo me angustio
porque en pocos días,
cuando esté de vuelta en el trabajo
extrañaré a mis bebes…
Me llegan las llamadas pérdidas de mi mamá,
en mensajes de textos.
Por suerte,
siempre hay un caballero que me ayuda a subir el carrito en las escalinatas de la estación de trenes.
Me gusta viajar pegada como mosca a la ventana
y mirar a través de los rayos de sol las pelusas que flotan en el aire.
Escribo algunos versos en la tapa de un diario evangélico:
“La claridad salió de mi con la forma de mis hijos.
La luz esta adelante y no en un punto fijo”


Gripi.